HABARANA Y SUS ENCANTOS 06 NOV 14. By Morfeo.

    Son las 7 Am y los rayos del sol inundan la habitación de Falcon CRIS, hoy nuestra hoja de ruta nos lleva a Habarana, donde nos esperan infinidad de actividades que esperamos con muchas ganas.

    Que mejor manera de levantarse de la cama, que ponerse el bañador y zambullirse en la maravillosa playa de Trincomalee, con la sensación de que eres el único humano a 10 km a la redonda. A la vuelta del baño el desayuno ya estaba en la mesa, increíble el trato recibido por Amal y tras ultimar los detalles del pago de la villa 340 € (2 noches y 2 cenas) y terminar de cerrar la maleta, nos pusimos rumbo a Harabana. 

     Tras dos hora y media de trayecto y dejar nuestro equipaje en el hotel The Other Corner en la que nos recibieron ardillas y una señora lavando o mejor dicho restregando la ropa en el río, nos encaminamos a una de las actividades que teníamos programadas con Manoj, un safari.  

      Nos comenta Manoj que en la zona hay 3 parques Nacionales: Minneriya, Hurulu Eco Park, Kaudulla. Y llama a conocidos suyos para saber en que parque hay más posibilidades de ver elefantes, dado que ellos migran según las lluvias.

      Finalmente el parque en el que hacemos el safari es Kaudulla y la mayor ilusión que teníamos era poder ver elefantes en libertad, estábamos como niños con zapatos nuevos, el brillo de nuestros ojos y esa sonrisa tonta que se te queda cuando sientes que te espera uno de los grandes momentos del viaje, nos montamos en el jeep y tras un curso acelerado de ISO's, diafragmas, aperturas, velocidades y luces impartido por nuestra corresponsal Mosquetera, nos adentramos en el parque, el precio fueron 12000 rupias, al cambio 72€ para los tres aunque Manoj nos dijo que el precio por persona y con chofer que llevábamos era aproximadamente de 40$ por persona, (lo dejaremos en duda). 

      Monos, pavos reales, águilas y demás especies se concentraban en el parque, la cámara sin descanso, disparaba y disparaba a todo lo que se posaba en una rama, árbol o caminaba por la carretera, tras media hora de trayecto, personalmente tenía mis pequeñas dudas de que pudiéramos ver algún paquidermo, pero el paisaje ya merecía la pena, y al girar lo primero que vimos fue a unos jeep que estaban parados, nuestros corazones se aceleraron, allí estaban, era una manada de aproximadamente 12 ejemplares, de todas los tamaños, la matriarca encabezaba el camino, las otras madres supervisaban a sus pequeños, que no se separaban de sus madres, había uno de ellos no que tendría más de 2 semanas de vida, el momento era indescriptible, tras un buen rato sacando fotos y mas fotos, seguimos nuestro camino y nos encontramos a otra manada de elefantes, este grupo era mayor, de unos 25 unidades, los teníamos a bastante distancia, ellos entretenidos en comer, nos dijeron que un elefante adulto puede comer unos 400 kilos diarios de hierba, y nosotros entretenidos viendo el espectáculo, además el día acompañaba, da la circunstancia que en caso de llover, se hace imposible poder verlos, pero lo mejor estaba por llegar, a 300 mts nos encontramos otro grupo pero estos tuvimos la oportunidad de fotografiarlos apenas a unos metros, un animal majestuoso.... 

 Su forma de cuidar de sus crías, de la sobreprotección, incluso daba la sensación de que los ocultaban con su cuerpo a los focos y los disparos de las cámaras que estábamos allí. Con el subidón del momento y de camino al restaurante que nos recomendó Manoj, estupendo, un restaurante local, de gente del país, donde los extraños no eran ellos, éramos nosotros, adaptados la momento, nos pusimos a comer como lo hacen ellos, con las manos, delicioso y auténtico. 

 Para terminar el día, y con la luna llena, nos dirigimos a un templo budista, donde los días de luna llena hace una ofrenda nocturna, todos van vestidos de blanco y los niños cantan bajo la atenta mirada de sus madres, ahí estábamos nosotros, con nuestra cámara en mano y disfrutando de un momento mágico, el incienso, la luna, la luz, y sobre todo su gente hicieron que nos fuéramos con el cuerpo cansado del día, pero con el mejor sabor de boca. 

      Mañana mas, prometemos emociones fuertes...